Es habitual que el miedo a acudir a la clínica dental haya sido generado por alguna experiencia negativa vivida o contada por algún conocido. Pero el miedo al dentista no puede ser un impedimento para que cuides tu salud bucodental y que dejes de ir a las revisiones recomendadas.
- Elige a ser posible tu cita a primera hora según la disponibilidad de ambos para evitar estar pensando en ello durante todo el día. Y que el tiempo de espera en la sala sea el mínimo posible.
- Antes de empezar cualquier tratamiento es bueno tener una cita previa para que el odontólogo le explique todo el diagnóstico y el procedimiento.
- Ordena tus tratamiento en escala de menos invasivo a más. Para comenzar, empieza por ejemplo con una limpieza o un empaste simple para ir conociendo al equipo de profesionales y así ir cogiendo confianza.
- Puedes comentarle a tu doctor la probabilidad de tomar algún relajante y cuál te aconseja ya que los pacientes con fobia son habituales en la clínica dental.
- Debido a los continuos avances en el sector, no tiene por qué haber hoy en día miedo al dolor puesto que para la mayoría de los tratamientos se usa anestesia.
- Levantar el brazo si notas dolor o estás agobiado es un gesto muy usado en nuestra clínica de este modo el paciente avisa al doctor evitando movimientos bruscos.
De esta manera, sea cual sea el tratamiento que necesites, es necesario que tu dentista sea sensible a tu miedo y se esfuerce para que estés a gusto. Por eso en las Clínicas Dental Bejarano empatizamos con tus miedos, cuidamos tu salud y te damos la confianza para que visitarnos sea un momento agradable. Llámanos y pide tu cita 😉
Artículo de Eva María Linares, higienista dental en Clínica Dental Bejarano.